Cómo cuidar de un cangrejo de río.

Son muy buenas mascotas ya que es muy divertido ver cómo se mueven alrededor del tanque, cómo intentan (y siempre fallan) comerse a otros peces y como construyen sus pequeñas montañas que sirven de casas. 

 

1. Consigue un cangrejo de río. Puedes encontrarlos fácilmente en las tiendas de mascotas o en los acuarios.  

Puedes buscarlos en corrientes o en cuerpos de agua poco profundos. Solo consigue una pequeña red, avienta unas rocas e intenta que los cangrejos naden directamente hacia tu red. Para transferir el cangrejo que hayas atrapado a tu casa, colócalo en un recipiente con un poco de agua (hasta un poco arriba de la cabeza) de donde estaba para que no se ahogue.

 

2. Consigue el tanque correcto para tu cangrejo de río. Los cangrejos de río necesitan un tanque con un pH de 7.0 (neutral) y una temperatura de entre 21º a 23º C (70 a 75º F). No uses un acuario con calefacción para estos cangrejos. Además de esto, el acuario debe tener un buen filtro y un buen sistema de ventilación. Un cangrejo de río necesita de 5 a 10 galones de agua para sí mismo.

No se recomienda tener más de un cangrejo en el tanque, pero si así los tienes, asegúrate de que tengan suficiente espacio para ambos y también muchos lugares donde puedan esconderse. También, si tienes múltiples cangrejos de río en un tanque, asegúrate de que sean de la misma especie o intentarán matarse entre sí.

Si los cangrejos de río pasan de 3 a 6 horas bajo el agua, se ahogarán. Además de la oxigenación de filtro, necesitas burbujas de aire o largas paredes de burbujas en tu tanque.

Asegúrate de cambiar parcialmente el agua cada semana para mantenerla fresca.

También puedes poner a tu cangrejo en un tanque con tus demás peces. Solo toma las medidas correctas (hablaremos más sobre esto más adelante).

No coloques conchas en tu tanque ya que pueden afectar el nivel de pH del agua.

Limpia regularmente el agua de tu tanque. Ya que los cangrejos de río tienen descargas biológicas muy grandes, se recomienda cambiar el agua al menos dos veces cada semana. Asegúrate de usar un declorinador cuando reemplaces el agua.

No uses un filtro de placa. A los cangrejos de río les gusta cavar, lo que puede hacer que se tape el filtro.

 

3. Haz que el tanque sea cómodo para tu cangrejo. A los cangrejos les encanta cavar, esconderse y estar en completa oscuridad, así que debes crear un ambiente que sea bueno para esto. Puedes agregar elementos como un castillo en ruinas, pipas de PVC, rocas o plantas. Les gusta subir por las plantas, pero asegúrate de usar plantas artificiales ya que podrían comerse las otras rápidamente. Necesitan rocas huecas, tubos para jerbos, o cualquier otro contenedor de 3 lados que se sienta seguro, especialmente cuando se sienten extra vulnerables al mudar de caparazón.

Intenta minimizar cuánta luz recibe el tanque ya que los cangrejos están más cómodos con la luz apagada.

 

4. Dale de comer a tu cangrejo de río. Usualmente la comida de los cangrejos son en forma de pellets (o pelets) que se hunden. Los pellets de camarón son perfectos para ellos. También les gusta comer vegetales. Ya que los peces también comen pellets de camarón, asegúrate de darles lo suficiente y ponérselos cerca de sus escondites para que no se los ganen los demás peces del tanque. También pueden comer comida para peces, pero esto no es suficiente para ellos.

Cuando se trata de vegetales, a ellos les gusta comer hojas de repollo, rebanadas de calabacita o chícharos (sin cáscara).

También pueden comer comida congelada como dafnias, gusanos de sangre, pescado congelado y artemias.

De vez en cuando puedes darle un poco de pollo cocido.

 

5. Asegúrate de mantener a tus cangrejos a salvo. Tu cangrejo puede vivir con otros peces, siempre y cuando no tengas peces que habiten en el fondo ya que a los cangrejos del río les gusta limpiar el fondo del tanque. Si tienes pescados exóticos, es mejor que lo pienses dos veces antes de agregar un cangrejo a tu tanque. Además de habitar en el fondo, los cangrejos también son carroñeros y cazadores, lo cual significa que atacarán a los peces que pasen delante de ellos. Aunque casi nunca logran atacar a los peces, es muy divertido ver cómo lo intentan.

La mayoría de los cangrejos atacan a los peces que se están enfermando y se hunden al fondo del tanque. No se les acercarán a los peces fuertes y sanos.

Si tienes un pez agresivo o uno muy grande, es muy probable que ataque a tu cangrejo.

A los cíclidos se les conoce por comer cangrejos de río. A los cangrejos de río se les conoce por comer pececillos de la región “montañas de la nube blanca”, carpas rojas y peces arcoiris.

Los peces dorados y los cangrejos de río no se llevan muy bien.

 

6. Asegúrate de cuidar de tu cangrejo de río al momento en que mude de caparazón. Los cangrejos de río mudarán de caparazón de vez en cuando lo cual hace que se sientan vulnerables y es por eso que debes de tener mucho cuidado con ellos. Cuando sea tiempo de mudar de caparazón, no se lo quites ya que usualmente se comen parte de él para ayudar a fortalecer el próximo caparazón que van a crecer. Durante este periodo no lo alimentes ya que solo se comerá su caparazón.

Algunas personas colocan a su cangrejo en un tanque por separado durante este periodo.

 

7. Evita que tu cangrejo se escape del tanque. A los cangrejos de río les encanta explorar nuevos territorios, así que asegúrate de proteger las aberturas en el filtro y de tener la tapa puesta firmemente en el tanque. También puedes usar papel aluminio, ligas de plástico o cinta para sellar las aberturas del filtro. Si tu cangrejo se escapa, puede deshidratarse y morir en un par de horas, así que es muy importante que vigiles esto.

Si atrapas a un cangrejo fuera del tanque, no lo coloques de nuevo en él. Sus pequeñas branquias necesitan acostumbrarse de nuevo al agua y si lo vuelves a poner en el tanque podría terminar ahogándose. Coloca a tu cangrejo en una cubeta con suficiente agua como para cubrirlo y agrega una roca para que se sienta menos vulnerable. Después de un día entero, sostén a tu cangrejo y sosténlo boca arriba en el superficie del agua. Si no le pasa nada, ya lo puedes regresar al tanque.